Escupe dragón tu fuego al aire
como el pedido sangrante
como la plegaria del pecador enfermo
al Santo Padre que está en el Cielo.
Eleva solemne águila tu vuelo
el intelecto no te limita
vence la gravedad
échate de un salto a lo Desconocido
y con tu Corazón en la Fe
descubre que ya estás volando.
Valeroso pez
sumérgete en las vastas aguas
bucea en las profundidades
del caldo de la vida
y encuentra la perla sagrada.
Poderoso león
emite tu rugido
como el clamor de la tierra,
pisa fuerte la hierba,
tú jamás pierdes el objetivo
en tu ser no habita la duda
ni la pereza.
Humano, hermano
ama y crea
a imagen y semejanza
de tu divina esencia.
